Ectoparásitos en gallinas ponedoras: riesgos y métodos de control en la avicultura

El manejo de gallinas en aviarios comerciales es bien conocido, pero no todos están al tanto de los ectoparásitos y los peligros que representan para la salud y productividad de las aves, especialmente en el caso de gallinas ponedoras y reproductoras. Un parásito común que afecta a las gallinas es el ácaro Dermanyssus gallinae, también llamado “piojo de la gallina”, el cual puede ser un desafío significativo para los productores avícolas.

¿Qué son los ectoparásitos y cómo afectan a las gallinas?

Los ectoparásitos son organismos que viven en la superficie de otros animales, alimentándose de ellos. Pueden permanecer en el huésped de manera continua o temporal, y en el caso de las aves, estos parásitos pueden ocasionar enfermedades que afectan tanto su bienestar como el rendimiento productivo de la granja.

La Dra. Nilce Maria Soares, experta en patología aviar, explica que los ectoparásitos son más comunes en gallinas que se crían en sistemas de confinamiento, como los aviarios industriales. La falta de exposición al sol y otros factores debilitan las defensas naturales de las aves, haciéndolas más susceptibles a estos parásitos.

Principales tipos de ectoparásitos en gallinas

De acuerdo con un estudio de Embrapa (Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria), los principales ectoparásitos que afectan a las gallinas incluyen:

  • Dermanyssus gallinae: conocido como “ácaro rojo de las gallinas”, es un ácaro que se alimenta de la sangre de las aves.
  • Ornithonyssus sp: otro ácaro que permanece en el ave de forma continua, conocido como “ornitoso tropical”.
  • Megninia sp: aunque no se alimenta de sangre, habita en las plumas de las gallinas.
  • Menopon gallinae y Menacanthus sp: son piojos que se alimentan de la piel y plumas, causando irritación, estrés y, en casos graves, anemia o dermatitis.

Control y prevención de los piojos en gallinas

Para controlar la infestación de estos ectoparásitos, es crucial evitar la introducción de aves infestadas en los aviarios y restringir el acceso de aves silvestres, que pueden actuar como portadoras de estos parásitos. El ácaro rojo (D. gallinae) se puede combatir con el tratamiento adecuado de las instalaciones y equipos, utilizando productos recomendados por profesionales. En cuanto al Ornithonyssus sp, es necesario aplicar acaricidas directamente en las aves afectadas.

La Dra. Soares también sugiere medidas preventivas, como evitar la propagación de ácaros a través de ropa y calzado contaminados, y mantener un estricto control sobre el acceso a las áreas de cría. Además, es esencial que el personal que trabaje en zonas infestadas no transite por áreas libres de parásitos para prevenir su propagación.